jueves, 18 de noviembre de 2010

La economía en nuestro país... ¿realmente estamos avanzando?


El pasado fin de semana se realizó el CADE en la región del Cusco, en el que se reunieron las principales autoridades en materia económica del gobierno junto con los más rankeados ejecutivos de las más grandes compañías de nuestro país, para debatir sobre la situación económica en la que nos encontramos. Cabe decir que además de invitados de renombre, como el catedrático de Harvard Michael Porter, estuvieron los candidatos que lideran las encuestas como Alejandro Toledo, Keiko Fujimori, Luis Castañeda y Ollanta Humala exponiendo sus planes de gobierno de cara a las elecciones del próximo año.
Bueno, pero lo más importante y de lo que quiero hablar, es que se tocó un tema que parecía un tabú para los economistas de nuestros país como lo es el crecimiento económico. ¿Realmente estamos en el camino correcto para salir del subdesarrollo? Veamos:
-Nuestra principal fuente de ingresos son la explotación de recursos primarios en el extranjero, y es gracias a la subida del precio de los commodities que nuestra crecimiento ha sido tan acelerado este último lustro.
-Como vimos, con la crisis financiera del 2008, nuestras exportaciones se vieron golpeadas  arrastrada por la recesión de los países que son los principales importadores de nuestros productos como  los EEUU y los miembros de la Unión Europea lo que demostró la fragilidad de la base de nuestra principal fuente de ingresos.
-Si tuvimos un superávit el año pasado, fue porque se redujeron las importación en mayor cuantía que las exportaciones, lo que nos indica que tal vez no nos fue tan bien en materia macroeconómica.
¿Suena muy técnico esto? Bueno , en síntesis lo que trato de decir, es que no tenemos el crecimiento que debiéramos, ya que seguimos como en la época del guano o el boom de la harina de pescado de la década de los 60, alegrándonos del presente sin pensar a futuro. Debemos ser exportadores de producto de valor agregado, atraer inversiones integrales, que aporten tecnología y mejoren nuestro capital humano. No simplemente que vengan a depredar nuestros productos sino que dejen que también seamos artífices de ello. Siempre que hablo de esto he tenido de ejemplo a Suiza y Japón, países sin mayores recursos primarios ni con ambientes propicios para la generación de biodiversidad, pero que sin embargo, confían más en el poder de emprendimiento de su población, invirtiendo en educación, siendo la base más importante de este avance, la investigación, sobre todo en las universidades. No dejemos que nuestro crecimiento nos ciegue, ya que aún nos falta mucho camino por recorrer para salir del subdesarrollo, pero si empezamos desde ahora es posible que los frutos los veamos muy pronto.

Sebastian Uribe Dìaz